Desde el momento en que Gael llegó al Hospital Shriners para Niños del Sur de California, su calma y buenos modales atrajeron a todos.
Recorrió el centro médico sonriendo y saludando a todos, y le fue fácil entablar amistad con otros pacientes. Al ver a Gael por primera vez, uno no se imagina lo que ha pasado a una edad tan temprana.
Gael tenía tan solo 2 años cuando un accidente en la cocina le cambió la vida para siempre. Estaba jugando con su prima menor en su casa de Tijuana, México, cuando una estufa se cayó y le causó graves quemaduras, desde el abdomen hasta los muslos. Su prima sufrió quemaduras en los tobillos, pero lamentablemente las heridas de Gael fueron más extensas.
Asustados pero decididos, los padres de Gael, Yoselin y Raúl, lo llevaron rápidamente al hospital más cercano. Allí, el médico los remitió al Hospital Shriners para Niños. Les aseguraron que allí Gael recibiría la mejor atención, y les dieron esperanza. Yoselin dejó a sus otros dos hijos y a su esposo en Tijuana, y tomó la difícil decisión de viajar al Hospital Shriners para Niños de Ohio, sabiendo que sería el mejor lugar para la recuperación de Gael.
Gael se realizó un tratamiento de injerto de piel en el Hospital Shiners de Ohio durante tres meses, con Yoselin siempre a su lado. Por suerte, Yoselin recibió apoyo de la familia cuando la prima de Gael, acompañada de su tía, llegó para recibir tratamiento también. Cuando los jóvenes primos se vieron, se sintieron más animados y con más energía para aliviar el tratamiento. Gael terminó su tratamiento en Ohio y regresó a su casa en Tijuana, con sus hermanos y su padre. Empezó a recibir atención más cerca de su hogar, en el Hospital Shriners para Niños del Sur de California. Desde su casa en Tijuana, la familia tuvo una consulta de telemedicina con la cirujana plástica Katherine Au, MD, para trazar un plan para el tratamiento de Gael.
