Caminando hacia un futuro mejor: La historia de atención y valentía de Karita
Con una sonrisa contagiosa y una risa irresistible, Karita, de 4 años, irradia alegría en todos lados con su valentía y resiliencia.
“En la consulta de las 17 semanas, el médico notó que le faltaba una pierna”, dijo Beverly, la mamá de Karita. Recién cuando nació Karita, descubrieron que tenía deficiencia focal femoral proximal (PFFD, por sus siglas en inglés).
La PFFD es una afección congénita rara y compleja que presenta una parte superior del fémur con malformaciones, o la ausencia de esta parte; por lo que una pierna es más corta que la otra. Esta diferencia suele afectar la capacidad de caminar y también generar tensión sobre otros huesos y articulaciones ya que el cuerpo intenta compensar. En el caso de Karita, nació sin fémur derecho.
“La PFFD es extremadamente rara en mi país natal, Kenia”, dijo Beverly. “Tanto así, que el especialista en ortopedia, con 20 años de experiencia, nunca había visto un caso de PFFD”.
La prevalencia de diagnóstico de deficiencia focal femoral proximal es de uno de cada 200.000 niños, y el tratamiento es muy individualizado, ya que la gravedad de cada caso puede ser muy diferente. Después de buscar diversas opiniones médicas, la familia de Karita encontró la atención especializada que necesitaba en el Hospital Shriners para Niños de Greenville. Solo en 2025, el personal del Hospital Shriners de Greenville atendió a niños de 43 estados y 46 países, especializándose en más de 85 afecciones ortopédicas pediátricas, entre ellas la PFFD.
En el centro de análisis de movimiento (MAC) ubicado dentro del Hospital de Greenville, el equipo médico evaluó el movimiento de Karita y recomendó el mejor plan de tratamiento, para maximizar sus resultados. Después de tener en cuenta las opciones, Beverly tomó la difícil decisión de amputar la pierna derecha de Karita.
Antes de llegar a Shriners Children's, Karita no podía caminar.
Después de la amputación, Karita comenzó a trabajar con el departamento de Servicios Ortopédicos y Prostéticos Pediátricos, POPS. Le colocaron una prótesis personalizada diseñada para brindarle comodidad, apoyo y la oportunidad de experimentar la vida como cualquier otro niño.
“Estaba muy preocupada antes de que recibiera su prótesis: no sabía si le iba a gustar o la iba a rechazar” dijo Beverly. “Pero los equipos de POPS y fisioterapia hicieron que fuera divertido para ella, y la ayudaron a aceptar su nueva prótesis de maneras que no esperaba”.
Hoy, Karita no sólo ama su prótesis, sino que camina sola con toda seguridad.
“El Hospital Shriners para Niños de Greenville es el mejor lugar para recibir atención ortopédica especializada. Hemos tenido la experiencia más increíble”, dijo Beverly. “Gracias al personal de Shriners Children's por ser tan altruistas. Como padres, no tenemos palabras para expresar lo que significa para nosotros esta atención médica”.