Derribando barreras: El rol fundamental de los trabajadores sociales en el avance de la atención al paciente

Marzo es el Mes Nacional del Trabajo Social y el tema de este año es "El trabajo social derriba barreras," de acuerdo con la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales. ¡Los trabajadores sociales del sistema Shriners Children's están dedicados a hacer precisamente eso!

Los trabajadores sociales de Shriners Children's derriban barreras

“Derribar barreras es algo que todos los trabajadores sociales hacemos todos los días”, dijo la trabajadora social Courtney Krakie del Hospital Shriners para Niños Northern California. “Nuestro trabajo es ayudar a las familias a resolver las otras cosas para que puedan concentrarse en la curación médica de sus hijos”.

Un miércoles cualquiera, se puede encontrar a Krakie con su camiseta que dice "Todo el mundo hace caca: Centro Pediátrico Colorrectal de Shriners Children’s" mientras corre por el hospital. El miércoles es el día dedicado a la clínica del centro colorrectal de Krakie, donde trabaja con pacientes con afecciones colorrectales y gastrointestinales. Usa la camiseta para normalizar hablar sobre problemas colorrectales con niños y familias. Es solo uno de los muchos ejemplos de cómo está trabajando para derribar barreras como trabajadora social para avanzar en la atención al paciente.

“Cada día es diferente”, dijo Courtney. “Nunca sé qué nuevo desafío u oportunidad surgirá. Eso es parte de lo que amo de mi trabajo”.

Krakie y los trabajadores sociales como ella en todo el sistema de atención médica de Shriners Children's son miembros integrales del equipo de atención de cada paciente. Mientras que algunos miembros del equipo de atención al paciente se enfocan en la cirugía y las necesidades de rehabilitación física del paciente, los trabajadores sociales se enfocan en ayudar a los pacientes y sus familias a atravesar los componentes psicosociales y emocionales de la curación. Trabajan en estrecha colaboración con médicos, enfermeros, fisioterapeutas, instructores escolares y especialistas en la primera infancia para garantizar que los pacientes y las familias tengan los recursos necesarios para superar cualquier barrera que se interponga en el camino de su salud física y emocional mientras se recuperan.

Un día en la vida de un trabajador social

Un día típico en la clínica para un trabajador social puede comenzar a las 7:00 a. m. Después de instalarse, puede asistir a una reunión con un equipo de atención multidisciplinario para hablar sobre los pacientes que se encuentran actualmente en el hospital y los que vendrán a la clínica ese día. El equipo analiza a cada paciente, su progreso médico y cualquier apoyo adicional que el niño y la familia puedan necesitar.

Luego, pasan sus días reuniéndose con pacientes y familias en todo el hospital: ayudando a las familias en crisis, completando el papeleo de inmigración, trabajando con asuntos de seguros y accediendo a alimentos, ropa y apoyo para la vivienda.

“Los trabajadores sociales brindan esperanza en situaciones en las que los pacientes y las familias se sienten abrumados”, dijo Trudy Wong, gerente de Servicios Sociales de los Hospitales Shriners para Niños Canadá. “Un trabajador social complementa la información que el equipo médico brinda a las familias. Una vez que se establece el plan médico, los trabajadores sociales se aseguran de que todo se entienda bien y que tengan los recursos y la capacidad para implementar el plan médico”.

Perseverancia y resolución de problemas

Los trabajadores sociales entienden la importancia de la perseverancia y la resolución de problemas cuando se trata de ayudar a las familias de los pacientes a superar las barreras.

“A veces, en este trabajo, simplemente no puedes aceptar un no por respuesta”, dijo Krakie. “Siempre estamos buscando más opciones, más oportunidades y diferentes formas de resolver un problema. No podemos rendirnos después del primer intento”.

Krakie trabajó recientemente con un colega trabajador social para descubrir por qué un paciente de 4 años no había recibido la autorización del seguro para una nueva silla de ruedas. La silla que estaba usando le había quedado pequeña y su madre no sabía por qué la compañía de seguros no había aprobado una nueva.

Después de muchas llamadas persistentes a la compañía de seguros, Krakie y su colega notaron que los documentos fundamentales del seguro se habían entregado en la casa de un vecino en lugar de en la del paciente. Gracias a la persistente investigación de los trabajadores sociales, el niño recibió la autorización para su nueva silla.

“Tuvimos que involucrarnos los dos para resolver el problema, pero finalmente lo hicimos y el niño obtuvo su nueva silla de ruedas”, dijo Krakie. “Era algo tan simple... el correo fue a la dirección equivocada”.

A los pacientes y las familias a menudo les desconcierta lo que hacen los trabajadores sociales en el hospital. Cindy Shimabukuro, trabajadora social del Hospital Shriners para Niños Hawaii, y sus compañeros trabajadores sociales en toda la red aprovechan cada oportunidad para educar a las personas dentro y fuera del hospital sobre su función.

“Una percepción errónea común es que solo hay un rol para un trabajador social”, dijo Shimabukuro. “Nuestra función es apoyar a las familias y brindar recursos para que los pacientes puedan recibir atención médica y obtener resultados positivos. Se necesita algo de tiempo para generar confianza y hacerles saber a las familias que estamos ahí para ayudarlos”.

Vínculos personales con el trabajo social

Muchos trabajadores sociales de Shriners Children's se sintieron atraídos por el trabajo porque ellos mismos se beneficiaron del trabajo social cuando eran niños.

“Mis padres son mayormente hispanohablantes. Cuando yo era pequeña, mis padres necesitaban que los ayude a traducir durante sus citas en el condado y para la búsqueda de vivienda”, dijo Maria Ortez, trabajadora social en el Hospital Shriners para Niños Southern California. “Me llevaban a esas citas para que yo pudiera traducir y completar cualquier papeleo en su nombre. Aprecié la ayuda que mis padres y mi familia recibieron de buenos trabajadores sociales. Me dije a mí misma que algún día ayudaría a la gente”.

Krakie también se sintió atraída por el trabajo social a una edad temprana después de ver de primera mano cómo un amigo cercano se beneficiaba del apoyo de un trabajador social.

"Cuando me di cuenta de que existía un trabajo que se trata de ayudar a la gente, dije 'inscríbeme'. Sabía que eso era lo que quería hacer”, dijo Krakie.

Los trabajadores sociales de toda la red de Shriners Children's mencionan que desarrollar relaciones con las familias y ver crecer a los niños durante los muchos años que trabajan con ellos es una parte especialmente gratificante del trabajo.

“Los trabajadores sociales tienen la oportunidad de ser incluidos en varios puntos de los recorridos médicos de los pacientes y las familias”, dijo Lauren Wepprich, trabajadora social del Hospital Shriners para niños Portland. "Ver el progreso de los pacientes, no solo desde el punto de vista médico, sino también con su confianza y autonomía en general, es inmensamente gratificante".

“Tengo la posibilidad de conocer a tantos niños maravillosos, todos con historias diferentes”, dijo Mayra DeJesus, trabajadora social del Hospital Shriners para Niños New England. “Tengo la oportunidad no solo de ayudarlos con cualquier necesidad que tengan, sino también de aprender de ellos. He construido excelentes relaciones en todos los departamentos del hospital. Ser parte de las diferentes clínicas, además de ayudar en el departamento de rehabilitación, me brinda un aprendizaje continuo e interacción con las familias”.

“Podemos pasar años con nuestros pacientes”, dijo Krakie. “Podemos verlos crecer. Shriners Children's realiza seguimiento a algunos de nuestros pacientes con prótesis desde el nacimiento hasta los 21 años. Podemos verlos crecer. Esas relaciones a largo plazo son lo que hace que el trabajo sea tan especial”.