Los juguetes divertidos inspiran futuras donaciones

Pacientes de todas las edades tienen gratos recuerdos de los juguetes y regalos en el hospital, lo que inspira a algunos de ellos a donar.

Hallie, de 8 años, paciente en el Hospital Shriners para Niños Chicago, nació con labio leporino unilateral completo y paladar hendido, en el que el labio de un bebé no se forma correctamente, lo que resulta en una división en un lado del labio. Recibió su primera cirugía de reparación del paladar hendido en Indianápolis y, lamentablemente, no fue un éxito.

“Esto fue duro para Hallie y para nosotros como padres”, dijo Katie, la mamá de Hallie. Sus padres buscaron otras opciones y finalmente eligieron al Hospital Shriners para Niños Chicago.

“Nos sentimos cómodos inmediatamente desde el momento en que cruzamos la puerta para nuestra primera visita y nunca miramos hacia atrás”, dijo Travis, el papá de Hallie. Hallie y su familia dijeron que la confianza que se crea entre los pacientes, la familia y el personal del Hospital Shriners para Niños Chicago hace que incluso los días de cirugías difíciles sean un poco más amenos.

Mitchell F. Grasseschi, MD, cirujano plástico del Hospital Shriners para Niños Chicago, reparó exitosamente el paladar hendido de la niña.

Después de su primera cirugía, Hallie recibió una muñeca American Girl. Este es solo uno de los muchos juguetes que Hallie recibiría después de una visita o cirugía. “Estos obsequios realmente marcan una gran diferencia para esos procedimientos difíciles, y estamos muy agradecidos”, dijo Travis.

Desde entonces, Hallie y su familia dijeron que los miembros del personal aquí habían superado sus expectativas con el enfoque de equipo.

Después de un par de procedimientos, Hallie les preguntó a sus padres de dónde venían los juguetes y ellos dijeron: “Bueno, los dona la gente”. Después de ese momento, Hallie decidió que quería devolver el favor y retribuir a un lugar que le había dado una nueva sonrisa. Hallie y su familia trajeron una donación llena de juguetes y juegos para los pacientes. Uno de los juguetes era un squishmallow, un animal de peluche similar al que también recibió Hallie.