A principios de octubre, Jheron estaba con su tía en la cocina de su casa en Panamá. Su tía se estaba preparando para cocinar, y cuando agregó un poco de aceite a una olla en la estufa, de repente se incendió y los quemó a ella y a Jheron. Jheron sufrió quemaduras en más del 75 % de su cuerpo y fue trasladado inmediatamente al hospital más cercano. Los médicos allí lo trataron lo mejor que pudieron, pero finalmente recomendaron que él y su madre fueran al Hospital Shriners para Niños Texas para obtener más ayuda.
“El hospital se comunicó y ayudó a organizar nuestro viaje hasta aquí”, dijo la madre de Jheron, Jetzabel. Una vez que llegaron a Texas, Jheron se sometió a seis cirugías para tratar sus quemaduras y a una extensa fisioterapia para ayudarlo a sanar. Además, aunque probablemente enfrentarán muchas más cirugías en el futuro, Jheron y Jetzabel se están preparando para regresar a Panamá y llevar una vida normal.
Los terapeutas, médicos y enfermeros fueron de gran ayuda.
Jheron y Fezzy trabajan juntos para difundir la alegría navideña en el Hospital Shriners para Niños Texas.
Jheron visita a un piloto local durante una actividad en el centro de desarrollo infantil.
Jheron se dirige por el pasillo hacia el centro de desarrollo infantil.
