Danielle Kanas, expaciente de los Hospitales Shriners para Niños de Florida y Filadelfia, ha enfrentado reveses a lo largo de su vida que la fortalecen en el camino hacia su objetivo de los Juegos Paralímpicos de 2028.
Kanas fue encontrada en una estación de tren en China cuando era apenas una bebé. Tenía una infección en la mano que ponía en riesgo su vida y que la llevó a la amputación de un brazo cuando tenía 3 semanas de edad. Fue adoptada y traída a los Estados Unidos, donde descubrió su pasión por el lanzamiento de jabalina, y ahora aspira a formar parte del equipo paralímpico en Los Ángeles.
Cuando llegó a EE. UU., empezó a atenderse en el Hospital Shriners para Niños de Filadelfia. Allí recibió su primera prótesis, que sería la primera de muchas a lo largo de su vida. A los ocho años, se mudó a Florida, el Estado Soleado, y continuó su atención allí. Kanas dijo que Shriners Children's la ayudó a desarrollar su confianza y su aceptación de su diferencia en las extremidades, y que pudo conocer a otros niños que se parecían a ella. El sistema de atención médica sin fines de lucro siguió siendo parte de su vida una vez que finalizó su atención, ya que siguieron alentándola y apoyándola en su siguiente etapa de vida. Kanas,atleta lanzadora de jabalina, asiste a la Universidad de Alabama y compite en el equipo de atletismo paralímpico Crimson Tide.
"Las prótesis fabricadas en los Hospitales Shriners también me ayudaron con mi carrera atlética", dijo. "Cuando comencé a lanzar jabalina y bala, tenía problemas con el equilibrio. Entonces, en Shriners me crearon una bonita prótesis de diseño liviano, con la que pude mantener el equilibrio en mis lanzamientos. También diseñaron prótesis que me han facilitado levantar pesas, como hacer press de banca, con una abrazadera en el extremo de la prótesis que me facilitaba el levantamiento".