El Hospital Shriners para Niños New England comparte estrategias para el desarrollo del habla y el lenguaje

Todos los padres esperan con ansias los hitos del primer año de su bebé y se preguntan cuándo ocurrirán los grandes momentos, incluido el sonido de sus primeras palabras. Sin embargo, la preocupación puede surgir rápidamente si los padres creen que el desarrollo del habla de su hijo no va por buen camino. Hospital Shriners para Niños New England La patóloga del habla y el lenguaje Sarah Ingraham, MA, CCC-SLP, educa a los padres sobre los puntos de referencia que deben buscar en el primer año de su hijo y cómo pueden ayudar a promover el desarrollo del lenguaje en su casa.

Según Sarah, los bebés deberían comunicarse de muchas maneras mucho antes de pronunciar sus primeras palabras. “Por lo general, los bebés comienzan a sonreírles a los padres a los pocos meses de edad, y también comienzan a arrullar y reírse muy temprano”, explicó. “Antes del año, esperaríamos que un niño preste atención a los sonidos que escucha en su entorno, mire la cara de sus padres cuando les hablan y reaccione a los sonidos fuertes. Los primeros gestos, como aplaudir y saludar con la mano, también se desarrollan durante el primer año”. Estos comportamientos muestran que los bebés están aprendiendo a comunicarse con los demás y ayudan a crear una base para habilidades de comunicación más avanzadas.

Los padres pueden ayudar a sus hijos a desarrollar habilidades lingüísticas modelando sonidos y gestos. Sarah recomienda que los padres participen en interacciones e intercambios verbales divertidos y lúdicos, y que hablen despacio y con claridad mientras su hijo les mira la cara y la boca. Del mismo modo, los padres pueden ayudar a su hijo a decir "hola" y "adiós" con la mano a personas, juguetes y otros elementos mientras dice las palabras también. Por ejemplo, “Hi da-da” (Hola papi) o “Bye-bye blue car” (Adiós auto azul).

A medida que los bebés se vuelven más vocales, también se espera que balbuceen con sonidos de consonantes como ma-ma-ma o ba-ba-ba. “Al año de edad, se espera que un niño forme al menos de una a tres formas de palabras consistentes, independientes y significativas”, dijo Sarah. “Puede que no sean palabras reales, pero deben decirse de la misma manera y con el mismo significado cada vez. Por ejemplo, 'pa-pa' para chupete, 'ba-ba' para biberón o 'wa-wa' para agua”.

Las estrategias de desarrollo del lenguaje pueden integrarse fácilmente en las rutinas y actividades diarias. Cuando los padres les leen a sus hijos, señalando los elementos en los libros y repitiendo las palabras de esos elementos, los ayudan a desarrollar el vocabulario. Hablar de las actividades diarias también refuerza el uso del lenguaje. Por ejemplo, cuando es hora de vestirse, un padre puede decirle a su hijo: “Aquí están tus zapatos. Vamos a ponértelos en los pies”.