Impulsado por un profundo deseo de retribuir y ser un modelo para otras personas con labio leporino y paladar hendido, Johan tiene aspiraciones futuras de convertirse en médico, ya sea cirujano maxilar o anestesista. “Ninguno de los médicos que he visitado tiene labio leporino y paladar hendido”, afirmó. Quiero estar presente para la próxima persona en mi lugar, como alguien que ha pasado por lo mismo y que puede brindar consuelo, ser una presencia tranquilizadora para la próxima persona como yo.
Su médico, Kamal F. Busaidy, DDS, cirujano del Hospital Shriners para Niños Texas, ha sido testigo de primera mano de la transformación de Johan. “Es notable lo inteligente, valiente y amable que es este joven. Ha tolerado su tratamiento con inmenso compromiso y paciencia, y siempre con gratitud. Estamos muy orgullosos de él”.
Fuera del hospital, Johan tiene un interés apasionado por la robótica; recientemente compitió en un evento VEX Robotics en Dallas, y disfruta diseñando kits de modelos y ensamblando sistemas complejos. “Me gusta diseñar objetos y unirlos”, manifestó con una sonrisa. También es un nadador apasionado y ha estado nadando por diversión durante varios años.
La herencia familiar de Johan es igualmente importante para él. Su madre es malasia y él participa activamente en la comunidad malaya local en Houston, colaborando voluntariamente en eventos juveniles y ayudando a organizar actividades culturales. Ya sea a través de su servicio comunitario o su objetivo de una futura carrera en medicina, Johan es ejemplo de empatía, dedicación y liderazgo.
Desde un niño que atravesó años de cirugías y citas hasta un joven listo para dedicar su vida a curar a otros, el recorrido de Johan es un poderoso testimonio del impacto de la atención integral y compasiva. En el Hospital Shriners para Niños Texas, Johan no solo encontró tratamiento y sanación, sino que también descubrió su vocación.