Con el paso de los años, Dave se enfermó. Finalmente, sus médicos le diagnosticaron insuficiencia renal terminal. Dijeron que Dave necesitaría diálisis por el resto de su vida o un trasplante de riñón. Dave también recibió la advertencia de que conseguir un riñón disponible podría tardar cinco años.
Fue en ese momento que Dave se acercó a Krystal para conocer de primera mano el proceso de trasplante. El esposo de Krystal, Jeff, había recibido recientemente un trasplante de hígado de donante vivo que le salvó la vida. Krystal tenía una visión sobre el trasplante de órganos que nadie más en la vida de Dave tenía en ese momento.
Durante esa conversación, Krystal identificó inmediatamente una oportunidad para devolverle el favor que le salvó la vida a su marido. Rápidamente descubrió que compartía el mismo tipo de sangre que Dave y, sin dudarlo, se ofreció a donar su riñón.
Dave estaba sorprendido... e inseguro. No quería ser una carga para Krystal. Ella se había convertido en alguien por quien él se preocupaba profundamente. Dave sabía que Krystal era madre de tres hijos y tenía un trabajo de tiempo completo.
Sin embargo, Krystal no aceptaría un no por respuesta. Ella le decía a Dave que el riñón le pertenecía cuando el decidiera recibirlo.
Después de un año en diálisis, Dave aceptó su oferta.
“Haz las maletas, Dave. Vas a recibir un riñón un poco usado pero nuevo para ti”, se rió Krystal.
Krystal le dio a Dave el regalo de su vida el 9 de mayo de 2023 en Louisville, Kentucky.
“Desde que era pequeña, siempre me preguntaba por qué Dave era tan bueno con nosotros, porque era tan amable y estaba tan dispuesto a ayudar con cualquier cosa. Siempre me he preguntado por qué. Lo que he llegado a entender es que si nací con una pierna para poder darle mi riñón a Dave, que así sea”, dijo Krystal.
“Este es un regalo que nunca podré devolver. Estoy muy agradecido”. Ahora siento que puedo hacer lo que quiera. No tomé dimensión de lo enfermo que estaba”, dijo Dave.