El Hospital Shriners para Niños Boston se centra en las familias: conozca a Maverick

Cuando Erin y Matt se enteraron durante un escaneo anatómico de 20 semanas que su bebé, Maverick, iba a nacer con labio leporino y paladar hendido, estaban decididos a aprender tanto como fuera posible sobre la afección de su hijo.

Inmediatamente, se concentraron en encontrar el mejor tratamiento disponible para su bebé recién nacido. Los futuros padres investigaron algunos centros médicos, hablaron con los médicos y recopilaron información que los ayudaría a tomar la importante decisión de dónde enviar a Maverick para recibir atención. A medida que obtenían más información sobre el Hospital Shriners para Niños Boston, Erin y Matt estaban seguros de haber encontrado el lugar perfecto para su familia. “Sabíamos que este era el mejor lugar para nosotros y nuestro hijo”, explicó Erin.

A medida que se acercaba el nacimiento de Maverick, sus padres se sintieron ansiosos por enfrentar lo desconocido. ¿Sería un desafío alimentar a Maverick? ¿Su condición afectaría el crecimiento y el habla? ¿Qué dirían los demás sobre cómo se veía? Gracias al apoyo de su equipo de atención en el Hospital Shriners para Niños Boston, Erin y Matt comenzaron a sentirse más cómodos e informados sobre los desafíos que podría enfrentar su familia.

Un activo y adorable niño de 1 año, Maverick, ha estado en movimiento desde que comenzó a gatear. Tuvo su primera cirugía a los 4 meses en su labio leporino y paladar hendido. Una segunda cirugía cuando Maverick tenía 10 meses que se centró en la reparación de su paladar secundario. Erin y Matt están asombrados por la fuerza y la resiliencia de Maverick después de someterse a dos cirugías en su primer año de vida. “Maverick ha sido realmente una estrella de rock”, dijo Erin. “Nos ha enseñado más de lo que podríamos haber imaginado”.

En las semanas previas a la primera cirugía de Maverick, Erin y Matt se preguntaban cómo sería su sonrisa después de la reparación. Erin recordó que Maverick tenía “la sonrisa más grande y brillante que definitivamente iluminaría una habitación. Después de las cirugías, su nueva sonrisa es igual de perfecta”, dijo Erin.

El apoyo del equipo de atención del Hospital Shriners para Niños Boston ha ayudado a toda la familia a atravesar cada paso. “Nos encanta poder comunicarnos con un equipo de personas cuando tenemos preguntas”, dijo Erin. “Todos los enfermeros, nutricionistas, patólogos del habla, trabajadores sociales y médicos nos han hecho sentir muy bienvenidos”.

La familia ahora visita el Hospital Shriners para Niños Boston cada dos meses para recibir atención continua. A medida que Maverick crece, su equipo de atención controlará su labio y su paladar, para determinar se necesitarán cirugías adicionales.

Erin y Matt tienen buenos consejos para compartir con otras familias. Ellos aceptaron la ayuda de sus familiares cuando se la ofrecieron, y eso fue lo que les permitió restablecerse y concentrarse en el cuidado de Maverick. “El primer año es difícil, pero te hará resistente y más fuerte de lo que crees”, dijo Erin. “Disfruta de todos los hitos alcanzados; simplemente pueden ser un poco diferentes, y eso está bien. Dese las gracias a usted y a su bebé mientras descubren lo que es mejor para todos”.

Erin y Matt decidieron compartir su historia para poder ayudar a otras familias que experimentan un diagnóstico de labio leporino y paladar hendido. Para ellos, una de las partes más difíciles del proceso fue no saber qué esperar. “Cuando Maverick llegó a nuestras vidas, nos sentíamos muy confiados y cómodos con su diagnóstico y estábamos muy abiertos a educar a otros. Descubrimos que las personas tienen mucha curiosidad sobre el labio leporino y el paladar hendido y quieren aprender más”, dijo Erin.