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Hinzee y sus planes de viaje

Tras un diagnóstico tardío de escoliosis, una paciente se "gradúa" del Hospital Shriners

Cuando Hinzee, de 20 años, termine la universidad en la primavera, planea pasar un tiempo viviendo en una furgoneta y recorriendo el país.

Dormir en una furgoneta sería insoportablemente incómodo si este año no se hubiera graduado de otro programa diferente.

A principios de este mes, Hinzee celebró su "graduación" del Centro Médico de los Hospitales Shriners para Niños — Lexington. Esto significa que ya no necesita que la atiendan allí por su escoliosis, una afección que consiste en una curvatura anormal de la columna vertebral.

La graduación tuvo un sabor agridulce para ella, sobre todo por lo única que fue su experiencia en el centro médico. A Hinzee le diagnosticaron escoliosis cuando ya tenía 17 años, una edad bastante más avanzada que en la mayoría de los casos. “Fui a la clínica para que me hicieran un examen físico deportivo porque jugaba golf” , contó. “La médica me preguntó de qué manera me trataban la escoliosis y yo le respondí que no tenía escoliosis”.

Pero para su asombro, y el de los demás, sí tenía.

“Cuando me hicieron la primera radiografía y la técnica vio mi columna, noté la sorpresa en su voz”, dijo. “No podían creer que hubiera pasado todo este tiempo sin saberlo”.

Hinzee admitió que, en retrospectiva, había algunos indicios sutiles de que podía tener escoliosis. Tenía dolor de espalda muy seguido, pero se lo atribuía al peso de la enorme bolsa con palos de golf que cargaba para todos lados. La altura de sus caderas y hombros era ligeramente desigual, aunque no tanto como para que se notara automáticamente, pero cuando se tocó los dedos del pie, uno de los lados de su espalda se veía más alto que el otro.

Debido a la edad en que le habían hecho el diagnóstico, las opciones terapéuticas de Hinzee eran bastante limitadas. “Como ya casi había terminado de crecer, no podían ponerme yesos o corsés”, explicó.

La derivaron al Centro Médico Shriners de Lexington, donde consultó a Vishwas Talwalkar, M.D.

Aceptó someterse a una cirugía de fusión vertebral para evitar que la columna siguiera curvándose. Se la realizaron el verano posterior a su primer año de universidad y se recuperó rápidamente. “Me hicieron la cirugía en mayo y pude ver a mis amigos por mi cumpleaños en junio”, dijo.

Atribuye la recuperación a los cuidados que le brindó en su casa su papá, que es enfermero, y la atención que recibió en el centro médico del Hospital Shriners para Niños — Lexington. Aseguró que el Dr. Talwalkar le permitió tener un papel activo en su atención. “Me dejó opinar”, señaló. “Me dijo que yo podía decidir si quería operarme o no, y que si no quería, él me ayudaría a explorar otras opciones. Siempre estuve informada sobre todo. Y siempre me respondió todas las preguntas”.

Se refirió al Dr. Talwalkar como uno de sus "mejores amigos" y agregó que está agradecida de haber podido crear un vínculo con el personal del centro médico. “Creo que fue distinto porque era mayor que la mayoría de los pacientes”, consideró. “Pude conectarme con ellos de un modo diferente, pero igualmente especial”.

Hoy espera con ansias el momento de salir a disfrutar la vida en su furgoneta después de recibir su título de licenciada en Geografía. También se le abren posibilidades gratificantes en otros aspectos de su vida. “Cuando pienso en mi futuro, sé que puedo esperar un embarazo más saludable y una vida con menos dolor”, dijo.

Pero para poder adoptar esta actitud optimista, Hinzee tuvo que dejar de lado algunos miedos, lo cual logró gracias al personal del centro médico. “Tenía mucho miedo”, expresó. “Que yo haya decidido operarme es una prueba de lo que vale el personal de Shriners. Se ocupan de los pacientes, y los hacen sentir seguros y cómodos”.

Y si bien está feliz de haberse graduado, extrañará las visitas al centro médico con su familia. “Ir al médico no siempre es divertido”, señaló. “Pero a mí me encanta venir a Shriners. Siempre es un placer ver al Dr. Talwalkar. Shriners representa mucho más de lo que algunos se imaginan. Ha sido una parte importante de mi vida. Estoy muy agradecida”.

Hinzee

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